lunes, 7 de octubre de 2013

¿Qué es la filosofía?

Se dice, que es el amor por la sabiduría. También se le define como el arte de amor al saber. Sin embargo, es importante que a pesar de las definiciones establecidas, con el conocimiento que se vaya adquiriendo, cada uno sea capaz de establecer su propia definición. 
¿Qué es entonces para mí, la filosofía?
Considero que va más allá de un arte, de hecho, soy capaz de elevarlo al nivel en el que los griegos vislumbraron y establecieron la Physis, es decir, el origen de todo. Debo además aclarar que, no soy ni me considero filósofo. Soy más un soñador, inventor y arquitecto de ilusiones, ideas y concepciones mórficas, nutridas gracias a la misma filosofía. 
Busco, y siempre ha sido así, conocimiento y saber que me permitan ir construyendo y conociendo mejor lo que me rodea. Por lo tanto, podría definir a la presente disciplina como: la maestra del saber, o quizá, como la herramienta primigenia del conocimiento; pero en una modesta opinión, es más que ello.
Para llegar a un conocimiento real es necesario adentrarse en la raíz de lo que se desea conocer.
Podremos verlo incluso más adelante a través de los diversos pensadores que irían ideando tantas formas de perpetuar en lo que se deseaba conocer. Formas que iré analizando con más calma a posterior conforme se vaya dando el momento. 
Planteando todo ésto, entonces, ¿qué representa la filosofía? 
Ésto nos lleva el ángulo o foco de atención desde dónde se debe centrar o atacar la cuestión que da el nombre a la presente entrada. La cual, a pesar de un racionamiento que aparentemente no lleva a nada concreto, refleja la actitud filosófica que a todos nos compete. Un filósofo lo es cuando cuestiona, pregunta e intenta ver que hay más allá de lo que se establece como cierto e incuestionable. Si se pone atención incluso, podremos ver como siempre en la actitud humana, preguntarnos el porqué de algo resulta ser una constante que forja una conducta la cual, si se llega a trabajar, puede no sólo derivar en una actitud crítica, sino en una mejora de vida propia. 
Por ello es difícil lanzar a la filosofía como una herramienta, siquiera como una disciplina, pues su aplicación es a veces tan natural en nuestra conducta que, sin exagerar, los infantes  la muestran  ante una clara actitud filosófica que se da al cuestionar siempre todo lo que para nosotros llega a ser cotidiano. 
Perder el interés en lo que nos rodea significa cerrarnos al descubrimiento y con ello, al autentico saber, y eso es lo que trata de evitar la filosofía, representando por ende, una cualidad para entender todo lo externo a nosotros, como el mismo interior que da origen a lo que somos. 
Sin importar la formación, edad o incluso, mentalidad, mucho menos la profesión que suele forjar un pensamiento de una manera, todos podemos comenzar con preguntas que de a poco, nos vayan haciendo dar con una respuesta sorpresiva en la cual, la opción de seguir descubriendo o la de permanecer donde estamos tenga que se decidida. 
Invito a cualquiera a formularse las cuestiones que aquí establezco, pues próximamente iremos viendo como los primeros pensadores griegos las concibieron y con ello, lo que las interrogantes los llevaron a realizar. 

2 comentarios:

  1. Me agrada tu postura, pero sobre todo me complace ver que tienes una noción mucho mas amplia que cuando comenzabas con aquellas lecturas, ya que, al parecer las ciencias económico administrativas han desplazado mucho a la filosofía de la sociedad actual, donde todo se concentra en el sistema capitalista y en la eterna lucha que hay entre las ciencias exactas y las disciplinas que cada día parecen estar mas indisciplinadas, llenas de ramificaciones y diversificaciones que provocan confusión y diversos puntos de vista, los cuales tristemente lejos de enriquecer y mejorar, parecen caer en estancamientos y en una ideología retrograda. Es decir, pese a tu formación como ingeniero, no tienes esa visión cerrada a los hechos concretos que a muchos les hace perder la capacidad de abstracción y el amor hacia las cosas no por su funcionalidad sino simplemente por que son.
    Hoy en día hemos caído en una sociedad de falso practicismo, donde lejos de buscarle utilidad a las cosas, mas bien terminamos dejando de lado las cosas que nos parecen poco útiles. Por lo que esta entrada en especifico me gusto y se me hizo como un llamado a retomar la filosofía no como una ciencia o como un estudio, sino como una herramienta utilitaria en la vida diaria, sin que esto signifique socavarla o reducirla, sino al contrario enaltecerla a un uso constante en nuestra vida y sociedad.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me agrada que te gustara y más aún, captaras el porqué de ponerla entre los primeros artículos. Efectivamente, la Filosofía va más allá de una ciencia o herramienta, es más una actividad que tenemos que practicar para mejora de nuestras propias aptitudes. ¡Un saludo y gracias por tu comentario!

      Eliminar